¿Necesito un seguro en esta era de monitoreo tecnológico?

El uso de nuevas tecnologías incide positivamente en los índices de siniestralidad, y este indicador puede tentar a los transportistas a prescindir de seguros o reducir coberturas.

El transporte de mercancías en América Latina enfrenta una creciente exposición a riesgos logísticos. Delincuencia, bloqueos en puertos y vías clave y accidentabilidad por malas condiciones de las vías hacen que el panorama para las empresas sea complejo y desafiante.

De acuerdo a diversos reportes, en 2024 el robo de carga en la región generó pérdidas estimadas en USD 5.500 millones, con países como México y Brasil a la cabeza, mientras que en países como Perú y Colombia son los bloqueos y cuellos de botella logísticos los que complican la actividad del sector de transporte.

Como respuesta, el sector apuesta cada vez más a la adopción de tecnologías para obtener información y posibilidades de análisis en tiempo real, transformando el monitoreo de carga una solución predictiva, para reducir riesgos y costos.

Hacia el monitoreo inteligente

Tradicionalmente, las opciones de “rastreo satelital” se limitaban a informar sobre la ubicación aproximada del vehículo y la carga en tránsito, para así responder en caso de desvío, retrasos o robo. Tener esta información, aunque reducía el tiempo de respuesta ante el siniestro, no ofrecía la posibilidad de anticipar desvíos, situaciones riesgosas o malas prácticas por parte de los operadores de transporte.

Las soluciones tecnológicas actuales no solo informan, ofrecen datos que te permiten predecir situaciones de alerta y actuar en consecuencia para mitigar el riesgo y evitar el siniestro.

Las compañías que adoptan soluciones de monitoreo inteligente reportan una notable reducción en la siniestralidad relacionada con robo, contaminación de carga sensible o desvíos logísticos, y esta realidad les permite ser más competitivos y evitar las pérdidas relacionadas con estos imprevistos.

Las tasas más bajas de siniestralidad también ayudan a las empresas de transporte a negociar mejores primas, deducibles más bajos y otras condiciones favorables en sus pólizas de seguro.

El riesgo evoluciona: El seguro también debe hacerlo

Una empresa de transporte que ha reducido significativamente sus pérdidas por robo o desvío, y cuenta con una política robusta de prevención, puede percibir la cobertura tradicional de su aseguradora como un gasto “innecesario”, y considerar incluso prescindir de su seguro.

Por eso, las aseguradoras deben evolucionar reformulando su propuesta de valor, planteándose a sí mismas como aliadas en la gestión del riesgo, en lugar de pagadoras de siniestros.

Las pólizas “estándar” deben quedar atrás, para dar paso modelos más dinámicos, personalizados y basados en datos, en los que la prevención y el uso de tecnologías de control sean reconocidos e incentivados en tiempo real, acompañando al transportista en el diseño y ejecución de una política de seguridad y prevención.

La sinergia entre aseguradoras, clientes y proveedores de tecnología es fundamental para una logística que responda a las exigencias del mercado actual.

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